Cada vez menos clientes, escasas ganancias, cuentas que se acumulan, inventario que no se mueve, alto endeudamiento y dinero que ya no alcanza, son síntomas claros de que tu negocio está a punto de quebrar y necesita ser rescatado con urgencia.
Afortunadamente, en medio de una crisis de esta magnitud, tenemos buenas noticias para ti.
No diremos que es fácil, pero si estás dispuesto a tomar acción responsablemente, tu negocio puede salir adelante si sigues estos consejos.
Primero: Analiza Qué Puede Estar Fallando en la Empresa
Las empresas pueden sufrir por muchas razones. Algunas pueden deberse a factores externos los cuales muchas veces son inevitables y otras se deben a factores internos que si pueden prevenirse y muchas veces enmendarse.
Lo más importante antes de iniciar cualquier acción de rescate para tu negocio es hacer un análisis profundo y consciente acerca de porqué llegamos a la situación en la que estamos.
Esto es muy parecido a ir al médico. Muchas veces acudimos cuando nos sentimos mal o bien cuando nuestro cuerpo ya presenta síntomas que requieren intervención médica urgente, a pesar de que no reconocemos que somos nosotros quienes nos hemos permitido llegar a ese estado de gravedad.
Con la empresa ocurre igual. Cometemos errores, caemos en descuidos, irresponsabilidad, presunción y cuando nos damos cuenta, revertir los efectos de las malas decisiones u acciones puede ser bastante complicado.
Estas son algunas de las razones comunes por las cuales un negocio podría debilitarse al punto de la quiebra:
- Crisis internacional que podría afectar tus mercados o bien las políticas con la que importas y exportas productos, si fuera el caso.
- Gastos desmedidos y sin control. Esto obedece a la falta de un presupuesto y de su justa ejecución.
- Altos costos de operación (local, servicios, infraestructura, etc.)
- Robos dentro de la empresa por parte de empleados o situaciones que pongan en riesgo la reputación de la empresa y su capital
- Contingencias que afecte serveramente el presupuesto como imprevistos, accidentes o sanciones de cualquier tipo
- Una mala proyección de negocios
- Vendedores flojos y/o falta de una buena estrategias de ventas y mercadeo
- No tener metas a mediano y largo plazo
- Una planilla demasiado costosa
- Altos gastos de operación
- Gerencia irresponsable ejecutando gastos discrecionales
- Endeudamiento continuo sin riesgo calculado
- Etc.
No detectar a tiempo los indicadores de riesgo puede llevar sin remedio tu negocio a cerrar sus puertas. Sin embargo, en la mayoría de casos cuando los directores de una empresa asumen su responsabilidad y logran tomar acciones correctivas, las empresas pueden salvarse.
Consejos Para Rescatar Tu Negocio
Si percibes cualquiera de los síntomas mencionados, estos son los consejos a seguir:
- Identifica los factores de riesgo en tu empresa. Reúne a un equipo de emergencia para hacer una lluvia de ideas e intenta determinar lo más honestamente posible las 2 principales causas de que el negocio vaya mal.
Similar a con el médico. Para tener un tratamiento efectivo, se deben determinar claramente los principales síntomas de la enfermedad. Se honesto contigo mismo y una vez que identifiques los indicadores de riesgo, entonces disponte a tomar medidas correctivas inmediatas, cualesquiera que estas sean.
Si es necesario auxíliate con algún consultor profesional de negocios que te ayude a visualizar con mayor claridad los posibles puntos ciegos. En este punto deberás tomar decisiones drásticas pero no hay otra alternativa para sobrevivir.
- Recorta gastos excesivos e innecesarios. Uno de los principales síntomas de que algo no marcha bien es que el dinero no alcanza.
De allí que es imprescindible reducir con carácter de urgente cualquier gasto que no contribuya positivamente a la operación del negocio y a generar utilidades: Demasiada publicidad, compra de artículos innecesarios, racionamiento de combustibles, frecuencia de los mantenimientos, rentas o alquileres de oficinas que no son funcionales, consumo en líneas telefónicas, comidas o viajes, etc.
- Evalúa recortar tu planilla de personal y la redistribución del trabajo. Aunque suene duro mencionarlo, en tiempos de crisis las medidas deben ser extremas. Probablemente sea tiempo de reducir personal y redistribuir las labores.
Recuerda que hablamos de rescatar tu empresa así que si no se hace esto, de todos modos tu gente perdería su empleo. Debes conscientizarles acerca de ellos y explicar que es la única alternativa para salir adelante. Esto te ayudará a reducir tu pasivo laboral y descongestionar los costos por planilla que suelen ser bastante altos.
Incluso puedes negociar el pago de pasivos laborales a plazos para reducir el impacto inicial (consulta las leyes laborales de tu país acerca de esto). Para hacer esto inteligentemente se debe hacer un estudio con tus colaboradores de mayor confianza para tomar las decisiones correctas.
- Analiza y detecta posibles fugas de dinero. Ya sea por robo directo o indirecto, desvío de fondos, alteración de precios o cualquier otro método de fuga de dinero debes detectarlo y cortarlo sin vacilar.
Dedica tiempo a analizar los procesos dentro de tu organización y determinar las debilidades en el sistema que permitan a los empleados “aprovechados” sacar partido de lo que no deberían. Importante, no restes importancia los gastos “hormiga” que suelen ser poco visibles pero representan enormes pérdidas a largo plazo.
- Pón un “hasta aquí” a los gastos personales indiscriminados. Un mal hábito que puede hacer fracasar un negocio sin piedad es el uso desordenado del dinero por parte de sus propietarios o directores. Esto muchas veces ocurre sin que se percaten de ello por no tener informes claros que lo reflejen.
Así que si realmente deseas salir a flote y respirar, es importante que comiences por ser tu mismo el ejemplo. Recorta todo gasto personal innecesario y asígnate un salario realista y acorde a la situación de tu negocio. Si tienes una tarjeta de crédito corporativa solicita límites más bajos y restringe su uso en todo lo posible. Y si es necesario designa la responsabilidad del manejo del dinero a un administrador que lo haga responsablemente.
- Elabora una estrategia de ventas de emergencia. Ya sea por la crisis o por cualquier otro motivo, finalmente la única manera de que un negocio crezca es vendiendo. Sino vendes no hay dinero. Evalúa tu estrategia de mercadeo y ventas. Evalúa a tus vendedores. Establece metas y desarrolla un plan de emergencia que represente un incremento en los resultados en corto plazo.
Elimina todo personal ocioso, cómodo o que por antigüedad tenga que permanecer sin aportar resultados. En tiempos de crisis debes vender, vender y vender. Y como lo he dicho en otros posts, es tiempo de dejar tu trabajo de escritorio salir a la calle y ser tú mismo el mejor vendedor de tu organización. ¡Esto creará una sinergia tremenda!
- Evalúa tus precios. Las acciones de rescate de un negocio a punto de quebrar tienen que ser una combinación de: más ventas y menos costos. Y para que haya más ventas es importante evaluar los precios de tus productos y servicios así como el valor que aportan.
En tiempos de crisis un ajuste moderado puede significar mantener a esos clientes fieles e incluso captar algún mercado potencial de gente que ahora más que nunca está buscando opciones de precios más favorables.
- Implementa un plan de cobros. Muchas empresas mueren porque sus acreedores no les pagan. Y muchas empresas no cobran porque no tienen el sistema ni el carácter para reclamar sus pagos. Este es el momento de implementar una estrategia de cobranza que permita recuperar capital acumulado en cuentas por cobrar.
Si no sabes como hacerlo contrata un cobrador temporal o freelance que te ayude a recuperar cartera morosa. Esto oxigenará tus finanzas y te ayudará a salir adelante.
Un Consejo de Vital Para Tu Negocio
Como puedes ver, lo más importante en todo esto es actuar pronto y evitar endeudarse a ciegas. Así que un último consejo que debo agregar y que es de vida o muerte es NO prestar dinero para saldar deudas. Utilizar tarjetas de crédito para pagar servicios o compromisos con proveedores puede ser como el “tiro de gracia” para un negocio débil y moribundo.
Evita hacer esto a toda costa. Es una tentación acceder a extra financiamientos o créditos rápidos con tasas altas pero debes procurar no car en dicha trampa.
Y para finalizar, me encantar recordar la historia de Donald Trump, un personaje que hoy en día no simpatiza con todos pero que en los años 80 cayó en quiebra y llego a tener una deuda por US$900 millones de dólares. ¿¡ Puedes imaginarlo !?
Así que sin importar si es de tu agrado, es un buen ejemplo de que cualquier empresario puede levantarse de la crisis más aguda y salir triunfador.
Muchos lo daban por irremediablemente quebrado, sin embargo se levantó y hoy por hoy es uno de los magnates inmobiliarios más importantes del mundo.
Levantarse se puede, rescatar un negocio que va mal, se puede. Pero requiere mucha voluntad, inteligencia y buscar asesoría externa para poder ver y enmendar lo que internamente muchas veces no vemos.
Si crees que este post puede ser de utilidad par alguien que lo necesite con urgencia, por favor compártelo, puede que estés contribuyendo a rescatar una empresa en alguna parte del planeta.
Fuente: https://www.1000ideasdenegocios.com/2009/09/como-rescatar-un-negocio-que-va-mal.html